En un proceso constructivo, el revestimiento es la etapa en la que se trabaja sobre las superficies para darles determinadas características relacionadas con la funcionalidad y la apariencia visual de cada sector. Constituye as tareas orientadas a proporcionar comodidad y estética, también se le suele denominar "obra blanca", comprendiendo las terminaciones para cielorrasos, escaleras, barrandas, muros, fachadas, puertas, ventanas, pisos, baños y cocinas. Durante este proceso se utilizan diferentes tipos de materiales -inclusive para una misma función- pero que difieren entre sí en sus presentaciones, calidad y precio. Se trata de la última etapa de la obra y es la que le dará gran parte de la apariencia general, razón por la cual se debe tener mucho cuidado en cuanto a la calidad y la presentación del trabajo y los materiales que se emplean.
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